Contratar un proveedor de hosting no solo te ayuda a visibilizar tu sitio en la web, también ayuda a garantizar el buen funcionamiento del mismo
Imagina que estás en medio del Ciber Monday, donde la competencia y el bombardeo de ofertas son magnos. Junto a tu equipo, te preparaste durante semanas para enfrentar este momento y definir qué clase de productos o servicios ibas a ofrecer al público, cuáles serían los precios y los porcentajes de descuentos, qué cantidad de elementos ofertarías y qué estrategia de promoción se aplicaría en los medios de comunicación tradicionales y en social media.
De seguro pensaste que sería un éxito para tu e-commerce, e indudablemente habría sido de ese modo si hubieses puesto atención en un importante detalle, la elección de un buen servicio de hosting. ¿Por qué? Resulta que todo iba bien hasta que transcurridos 15 minutos, y debido al aumento de tráfico, tu sitio colapsó durante horas, y lo que sería una lista de buenos comentarios en redes sociales, se transformó en una avalancha de críticas y reclamos.
Ese escenario ficticio, pero posible, refleja lo indispensable que es invertir en un servicio de almacenamiento adecuado. ¿De qué te serviría diseñar y poner en marcha una gran estrategia de marketing, si eliges el plan de hosting sin hacer una investigación? Para un e-commerce, atraer y fidelizar clientes es fundamental, por lo tanto, la búsqueda del servicio debe hacerse de acuerdo a las necesidades de alojamiento que tenga tu sitio.
Pero en concreto, ¿cuáles son las posibles consecuencias de una mala elección?
– Costos: en agosto de 2013, Amazon.com tuvo una interrupción de 40 minutos, que le costó cerca de 5 millones de dólares en ventas perdidas. Puede que no sea una pérdida enorme para una compañía de ese tipo, pero igualmente es un costo que podría haberse evitado.
– Pérdida de clientes: ¿qué pasa si tu competencia funciona a la perfección y tu sitio se mantiene inactivo?, ¿crees que tus clientes te esperarán por horas o emigrarán a la otra tienda? Lo más probable es que decidan dejarte, en especial, si esa no es la primera vez que tu página se cae.
– Falta de confianza y desprestigio de la marca: esos mismos clientes se encargarán de transmitir su descontento en sitios de reclamos, redes sociales, y en cuanta vía encuentren para exponer el problema existente. ¡Peor aún si no hay una pronta solución! Tal vez, el nombre de tu e-commerce se convierta en el nuevo trending topic del día y de seguro no te gustará leer por qué.
¿Cómo elegir un servicio de almacenamiento web?
Responder las siguientes preguntas te ayudará a definir lo que necesitas.
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¿Cuáles son los planes y cuánto cuesta cada uno?
Las empresas de hosting tienen el detalle de los servicios en sus sitios online; así que antes de visitarlas físicamente puedes hacer un vitrineo virtual, comparar y conocer las características de cada plan. Hay servicios de hosting básicos y de alto rendimiento; pero para decidirte por uno deberás considerar el tamaño de tu sitio. Por ejemplo, ¿por qué pagar un plan empresarial de 20 GB de espacio total, si empleas mucho menos de 10? No se trata de centrarse en abaratar costos, pero si de optimizar tus gastos y poner atención en la calidad del hosting.
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¿El servicio es adaptable a las necesidades de tu e-commerce?
La escalabilidad es una característica de gran importancia en un proveedor de alojamiento web, ello hará posible que tu sitio no colapse frente a una emergencia como el aumento inesperado de tráfico. La idea es elegir un servicio flexible que se adapte a los recursos y características que requiera tu sitio, para evitar la inactividad de éste debido a la sobrecarga del servidor.
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¿Ofrece reembolsos?
Puedes encontrar empresas que ofrecen un periodo de prueba para conocer el rendimiento real del servicio, aunque otras te pueden solicitar que compres el plan de alojamiento. ¿Pero qué ocurre si ves que lo adquirido no funciona para ti? Como de seguro no te agradará sentir que estás perdiendo tu dinero, averigua sobre las políticas de reembolso o de garantía de satisfacción, así evitarás encontrarte con sorpresas desagradables.
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¿Recibirás asistencia a toda hora?
El servicio al cliente es un factor que no puedes obviar al momento de hacer una elección. ¿Estarán disponibles para ti, 24/7 y los 365 días del año? Asegúrate de que sea así y de que existe personal competente para resolver los problemas. No te gustará que tu sitio muestre un código de error HTTP, a las 3 de la mañana y que persista durante horas por falta de asistencia.
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¿Cuál es el tiempo de actividad del servidor?
El tiempo de actividad o Uptime es el período donde el servidor trabaja ininterrumpidamente, lo cual es indispensable para que el sitio de tu tienda se mantenga activo y pueda ser visitado por los internautas. El fenómeno contrario, corresponde al Downtime o tiempo de inactividad, que si bien es normal en toda empresa de Hosting, éste tiene que ser programado; es decir, la compañía debe informar a sus clientes e incluir un horario estimado de corte.
¿Y qué ocurre si existe una interrupción sin aviso? En una empresa seria ese fenómeno no puede ocurrir, porque ésta debe estar preparada para dar soluciones a imprevistos. Es más, un servicio de calidad debiera entregar una garantía sobre el 99,5 % de Uptime, más aún si consideramos que según el sitio E-commerce Nation, ese tiempo de actividad significa que durante 50 minutos a la semana, su sitio será inaccesible. Así que opta por una empresa que te asegure una cifra lo más cercana al 100 %; si es del 99,7 % hacia arriba, mejor aún.
Ciertamente existen más factores que debes evaluar, como los términos y condiciones del servicio, la fiabilidad y reputación, la frecuencia en el respaldo de tu información, las características del Data center, los tipos de sistemas operativos, entre otros. Lo fundamental es optar por una empresa que se adapte a las necesidades de tu e-commerce, que cuente con altos estándares de calidad y que realmente esté disponible para ti durante 24 horas y los 7 días de la semana.
Y tú, ¿qué elemento considerarías antes de elegir un servicio de alojamiento web? ¡Cuéntanos!
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